Me encontré con mi primera compañera EVS en el aeropuerto, Raigi, una chica estona algo reservada pero que con los días se va soltando. Pues con ella me hice el resto del viaje a Feltre, donde había una hora de bus a Padova y una hora y media de tren más sus respectivas horas de espera...todo ese tiempo hablando con una persona reservada y un inglés digno de ser fusilado por cualquier angloparlante. Llegamos a nuestro destino donde nos encontramos con el resto del grupo. Una letona muy graciosa, Agnese, un catalán bastante peculiar, Damian y mi tutora, Irene.
Una vez en Lamon entramos en nuestra humilde morada, una antigua escuela que cuando estás solo por la noche y te vas a duchar, lo primero que se te pasa por la cabeza es la famosa escena de la película de psycho. Nos acomodamos en nuestras habitaciones y nos fuimos al pueblo a tomar algo.
Al día siguiente llegaron los EVS de Venecia, Sernalia y Rovigo. Una macedonia de nacionalidades, entre ellas había una polaca, una francesa, una alemana, una rusa, una armenia y dos lauras, españolas claro, y una de ellas cuya idea inicial es comprarse el coche más cutre posible para escalar todo lo que se le ponga por delante. Muy simpática y que tiene a su novio en España metido en un zulo con una hogaza de pan y un cubo de agua, pero esto es otra historia que sinceramente no me acuerdo porque salio, pero fue derivando de estar en un zulo a ser gollum en una caverna.También vino la coordinadora con su familia y el tutor de Venecia, Jose, un tío muy majo. Con ellos empezó las primeras visitas a los bares de la zona, entre ellos uno con estilo rockero que me recordó al Boothill de Majadahonda.
Los días juntos estuvieron bastante bien, entre alguna excursión digna de mencionar como la hecha a la cascada del Salton donde nos bañamos Laura, Jose y yo, ya que al “a que no hay huevos” un español es incapaz de decir que no. Estaba helada de cojones pero fotaco que conseguimos y rejuvenecimos 3 años. En general todo el paisaje era molto bello. Salimos de fiesta el sábado ya que había un conciertillo en el Pub y celebramos el cumple de Raigi. Me aposte a que me bebía medio litro de cerveza en menos de 4 segundo..y di la talla. Los restantes días, hasta que cada cual se marchara a sus respectivos proyectos, marcharon sin sobresaltos y afianzando amistades. 13 días juntos, 13 días conociéndonos y 13 días que me han brindado la oportunidad de asentarme en mi nuevo hogar. Este pequeñito pueblo de montaña llamado Lamon donde las ragazze brillan por su ausencia y cada cerveza que te tomas, es un día que no comes.
Pero antes de empezar el trabajo, había un finde de por medio. Dos opciones, que se planteaba entre quedarse en casa o bajar el sábado a Padova. Peeeero sabiendo que nuestra tutora volvía el domingo por la noche de Padova propuse la tercera opción, ir a Venecia (no dejes para abril lo que puedas hacer en marzo) el sábado y empalmar con Padova el domingo para volver con Irene. Y el plan salio sin peros. Un finde veneziano muy agradable y un domingo de solaco tirado en un jardín de la segunda plaza mas grande de Europa, tras la de Moscú.
Ya toca a hacer cosillas, empezar las clases de Italiano, desayunar cherioos en vez de tostas con mermelada y empezar a perder el ultimo bus del día a Lamon y que nos suban gente del pueblo pero esto ya son otras historias.
Por el momento esto es lo que hay... :)
Grande Fer! Intentaré seguir tus andanzas por aquí ;-)
ResponderEliminarDisfruta de la experiencia!
Un abrazo grande desde tierras angloparlantes!